Lo que están haciendo el Presidente Lacalle Pou y su entorno con Alejandro Astesiano, es tratar de distanciarse de su accionar delictivo y mafioso y cruzar los dedos para que llegue a un arreglo con la Fiscalía sin hablar demasiado. Por sobre todas las cosas eso: que no hable demasiado.

 No voy a hacer un recuento de todo lo que se viene descubriendo de las andanzas delictivas del Jefe de Custodia del Presidente, porque diariamente se descubren cosas nuevas y seguramente cuando usted lea esto ya habrá 3 o 4 delitos nuevos descubiertos a Astesiano y su banda. Trabajaban con total impunidad desde el Piso 4 de Torre Ejecutiva, en el mismo edificio del Presidente y también a pocos metros de la oficina del principal responsable del Servicio de Inteligencia del Estado, el actualmente desaparecido señor Álvaro Garcé. En las narices de estos altos jerarcas se falsificaban y vendían pasaportes truchos, se utilizaban vehículos oficiales para trasladar empresarios que negociaban con Astesiano, se ofrecían servicios de las cámaras de seguridad del Ministerio del Interior. ¿Nadie sabía?

Ayer surgió la noticia de que no existen registros de ninguna de las visitas que Astesiano recibió en la Torre Ejecutiva, cuando todos los que han entrado al edificio aseguran que tienen que dejar la cédula en la entrada, pasar ante cámaras de reconocimiento facial, les escanean las mochilas y bolsos. Pues bien: ahora parece que casualmente las visitas que recibía Astesiano no quedaron registradas en ninguna parte. Obviamente que desde Presidencia de la República están haciendo lo posible por ocultar toda la información que puedan e incluso por quitarle importancia al delincuente que era jefe de custodia presidencial.

En estos días se supo que Astesiano fue contratado por una empresa extranjera para realizarle espionaje a dos senadores del Frente Amplio, debido a que son los que más activamente denunciaron el “regalo” que el gobierno de coalición le hizo a la empresa Katoen Natie al darle el puerto de Montevideo por 80 años. Espionaje en democracia no era lo que nos habían prometido para los cinco mejores años de nuestra vida, no?

Están pasando cosas muy graves y todo indica que solo estamos viendo la punta del iceberg. Procedimientos mafiosos, autoridades tratando de ocultar pruebas y de quitarle importancia al papel de Astesiano, espionaje en democracia. Es todo realmente muy grave. Sumemos a esto aquel hecho previo -que aun no se sabe si está vinculado a esta organización delictiva- mediante el cual el gobierno de Lacalle Pou le entregó en sus propias manos un pasaporte a un uruguayo cabecilla de un grupo asociado al narcotráfico internacional, que estaba preso en Dubai. Hecho sin precedentes en la historia de nuestro servicio exterior.

La inoperancia absoluta del Ministro del Interior llega a niveles cercanos a dar lástima. El Director de Inteligencia confunde documentos y no sabe cuál es el que se difundió. Hay tres ministerios que fueron hackeados, por lo que se les robó toda la información. Todos los días aparecen familiares de jerarcas que fueron designados de forma directa en puestos del Estado y empresas que ganan licitaciones y que casualmente tienen familiares directos en la administración pública. Mientras tanto, quieren que la gente trabaje hasta los 65 años para cobrar menos jubilación.

¿En qué manos estamos?

José Luis Pittamiglio – Edil Departamental Partido Socialista (FA)

Fuente : elecodigital.com.uy

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