Un inspector de tránsito presentó hoy ante las tres bancadas de la Junta Departamental un documento que contiene el detalle de la denuncia realizada en Fiscalía “y lo que deberian ellos investigar sobre hechos concretos de acoso laboral y hechos de posible corrupción en la Dirección de Transito”. Asegura que hay más inspectores dispuestos a dar testimonio de estos hechos.
Entre los presuntos ilícitos figuran “actas adulteradas , vehículos que fueron entregados irregularmente, espirometrías mal anuladas para favorecer distintos amigos del poder, motos que figuran como chatarra y que fueron entregadas, etc.”
Así lo señalaron a EL ECO fuentes cercanas a los denunciantes, los que quedaron a disposición de ser citados por los ediles para relatar y mostrar pruebas de lo denunciado “al igual que al Intendente , a quien le deje otra copia con su secretaria Kelland y quedando también a disposición de reunirnos y también presentarle pruebas de lo denunciado en Fiscalia” señaló a EL ECO.
En la denuncia señalan que “Quienes hacemos esta denuncia estamos cansados de las arbitrariedades, destrato y malas prácticas en la función pública que realizan los jerarcas en la Dirección de Tránsito de la Intendencia de Colonia y de los cuales no queremos ser cómplices o rehenes de esta situación”.
Dado que en esta dirección hubo actuaciones judiciales con condenas, dicen “Últimamente en virtud del cúmulo de hechos que se suceden en la misma, hemos optado por presentar una denuncia en Fiscalía Colonia, donde en el presente se investigan algunos hechos con presunción delictiva”.
Pérdidas para el erario.
La denuncia comienza señalando el caso de un funcionario al que se le pagó una diferencia de 25.000 durante un año. La resolución que luego fue revocada no tuvo sanción para los jerarcas involucrados “en inventar un cargo que no existe en el escalafón y trabajos que nunca se realizaron” señala la denuncia.
En otro caso, varios funcionarios condenados por la justicia y la desaparición de elementos inhereentes a la función de tránsito.
La enumeración de irregularidades que fueron denunciadas a fin que se determine la posibilidad que sean delitos, incluye:
I: MULTAS
Desde hace muchos años, la Dirección de Tránsito y las autoridades competentes de la Intendencia de Colonia, no pasan un informe sobre los porcentajes que le corresponden a cada inspector por las multas efectivamente aplicadas. Por lo que, se deberá hacer un estudio pormenorizado de las multas, los porcentajes y a quienes efectivamente se le pagan, dado que hay información reservada que quienes estarían cobrando, no están legitimados para ello.
Cada inspector tiene una libreta numerada, y es muy fácil para las autoridades, hacer un relevamiento de cuánto porcentaje le corresponde a cada inspector, y a quienes efectivamente se les paga, si son inspectores efectivos, jerarquías o funcionarios administrativos. Obra en nuestro poder, información acerca de estos pagos a funcionarios que no les corresponde por no ser inspectores en ejercicio. Estos pagos improcedentes, van en desmedro de los inspectores quienes están amparados por el presupuesto quinquenal que así lo determina.
Esta denuncia ya fue presentada en Fiscalía Colonia y desde la Junta Departamental se le solicitó al Tribunal de Cuentas se auditara la Dirección de Tránsito en lo concerniente a multas y los porcentajes efectivamente pagados a cada uno de los inspectores y si existen pagos indebidos.
II: INCAUTACIÓN DE VEHÍCULOS
Existen graves irregularidades posteriores a la incautación de vehículos y hemos podido comprobar que motos que aparecían en el sistema como desguazadas, estaban en un depósito Municipal. O vehículos que han sido entregados sin ningún tipo de documentación por ser el titular, familiar de un jerarca de la Intendencia.
Los actos administrativos de la Intendencia, deben de ser cristalinos sujetos a controles permanente, cosa que no suceden en la actual administración y dejan lugar a posibles hechos de corrupción que deberán investigarse por las autoridades correspondientes.
III: HURTOS
Han desaparecido de la Dirección de Tránsito, entre otros, equipos para inspectores, hidrolavadora, muebles, pintura, aspiradora industrial, sin que se haya hecho ningún tipo de investigación administrativa al respecto.
VI: ADULTERACIÓN Y DESTRUCCIÓN DE DOCUMENTO PÚBLICO
Hemos podido constatar la adulteración de Actas de Contravención, cuando se trata de infractores amigos del poder, con el objetivo de que esas multas no se cobren.
A modo de ejemplo: Actas donde se modifica con un trazo y un tono diferente números de matrículas o documentos, inutilizando de esta manera el documento original elaborado por el inspector actuante.
Carpetas encontradas en locales Municipales con documentos que no llegaron a la Dirección de Tránsito, siendo documentos públicos que no se sabe por qué están en un local expuestos a la destrucción de las mismas y sin ingresar al sistema.
Tuvimos a la vista Expedientes donde luego de una expirometría positiva al infractor, las mismas fueron dejadas sin efecto por las autoridades, habilitándolos a conducir en forma incorrecta.
En un caso concreto: Se multó a un ciudadano que oficiaba de chofer del Diputado Colman por espirometría positiva (reincidente). Por gestiones de jerarcas de la comuna de la Intendencia se le devolvió la licencia, pero posteriormente otro jerarca dio orden de que se siguiera adelante con el procedimiento en virtud de que se había constatado alcohol en sangre al conducir.
Una de las perlas del caos administrativo que hay en la Dirección de Tránsito y que roza con la corrupción es el caso de un funcionario que, habiendo sido condenado por la justicia, siguió cobrando sueldo, viáticos y horas extras.
Se nos hace imposible resumir en poco espacio la gravedad de los hechos denunciados dado que esta Dirección ha perdido toda objetividad y contralor de la buena función pública la probidad, ética en la función.
Existe un grupo de jerarcas que, desde hace muchos años, hacen y deshacen a su antojo, violando toda normativa de la función pública, sosteniendo estos procedimientos en otros funcionarios que realizan tareas contraviniendo las normas administrativas y que luego de una u otra manera reciben prebendas o beneficios de otra naturaleza.
No es casual que la justicia haya investigado y condenado a funcionarios que en connivencia con otras personas ajenas a la función pública entregaran licencias de conducir adulteradas. Ese procedimiento sería detectado rápidamente si los jerarcas ejercieran control sobre todas las funciones que se desempeñan en la dirección de tránsito.
Hacemos esta denuncia, entendiendo que la ciudadanía debe conocer estos hechos y quienes han sido electos para desempeñar cargos públicos, asuman sus competencias y responsabilidades si los hechos que estamos denunciando son probados.
Deberán las autoridades competentes, investigar los hechos, tomar cartas en el asunto y de comprobarse las mismas, hacer las denuncias administrativas y penales correspondientes. En nuestro caso, hemos aportado datos a Fiscalía de los que tienen presunción delictiva. Otros como el acoso laboral, son del área del Gobierno Departamental, Intendencia y Junta Departamental.
Los funcionarios denunciantes quedamos a disposición de las autoridades para ratificar los hechos denunciados.
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