La posible designación de Francisco Bustillo como embajador de Perú abrió un nuevo foco de debate en la transición y, a pocos días de que la venia sea discutida en el Parlamento, se mantiene la incertidumbre.
Diplomático de carrera y con cargos de relevancia durante los gobiernos del Frente Amplio -embajador en Argentina y España-, Bustillo llegó a ser ministro de Relaciones Exteriores en el actual gobierno, pero debió renunciar en noviembre de 2023 tras la divulgación de audios en el caso de la entrega del pasaporte al narcotraficante uruguayo Sebastián Marset.
La semana pasada Telemundo informó que el gobierno saliente de Luis Lacalle Pou enviaría al Parlamento la venia para que fuera nombrado embajador en Perú, donde actualmente se desempeña el exvicepresidente Luis Hierro López. El tema fue conversado entre Lacalle Pou y el mandatario entrante, Yamandú Orsi. Según informó El Observador, también fue dialogado entre los secretarios de la Presidencia saliente y entrante, Rodrigo Ferrés y Alejandro Sánchez, respectivamente. Según el citado medio, el frenteamplista manifestó que no respaldaba la designación de Bustillo.
Este martes Búsqueda informó -y confirmó Telemundo- que el gobierno uruguayo ya recibió el beneplácito de Perú para designar a Bustillo. Se trata de un trámite protocolar para otorgar el visto bueno a la llegada de un diplomático.
La solicitud de venia debe ser enviada por el Poder Ejecutivo al Parlamento y será analizada por la Comisión Permanente antes del 15 de febrero, cuando comienza la nueva legislatura. El asunto podría ingresar en las próximas horas al Poder Legislativo y se espera que sea debatido la próxima semana.
Contando votos
A diferencia de la enorme mayoría de las venias, que se aprueban con amplias mayorías y sin discusión, en este caso hay inquietud.
La Comisión Permanente tiene 11 integrantes, seis de la coalición y cinco del Frente Amplio. Presumiendo que el Frente Amplio no lo apoyará, la coalición debería votar en bloque para lograr la designación. El Partido Nacional tiene tres representantes -Graciela Bianchi, Pedro Jisdonian y Gabriel Gianoli-, el Partido Colorado dos -María Eugenia Roselló y Carmen Sanguinetti- y Cabildo Abierto uno -Sebastián Cal-.
El foco está en qué postura tomarán los colorados. El partido fue especialmente crítico de Bustillo durante su gestión en Cancillería. Por ejemplo, Pedro Bordaberry -líder del espacio que integra la legisladora Sanguinetti- le apuntó en varias ocasiones como responsable del incidente del «caso Marset» que terminó con la renuncia de Carolina Ache como viceministra.
“Qué cama le hicieron a Carolina Ache”, llegó a decir Bordaberry.