Por la prensa los trabajadores se enteraron que la empresa láctea Granja Pocha se vendía a la multinacional Lactalis. Con eso, se perderían cien puestos de trabajo en Lactalis Cardona y la actividad se concentraría en Juan Lacaze.
Enrique Méndez, dirigente de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL), señaló a EL ECO que tuvieron una reunión tripartita (empresa, Ministerio de Trabajo y gremio) y se acordó “una negociación hasta el 15 de marzo”, porque la intención de la francesa Lactalis es dejar en Cardona sólo “la producción de leche en polvo y manteca”, lo que implicaría la pérdida de 100 de los 150 trabajadores, al concentrar la mayor producción en Juan Lacaze. “Nosotros planteamos cero despidos de trabajadores”.
Méndez remarcó que “hay gran incertidumbre en las familias trabajadoras de Cardona”: es la única fábrica que hay en actividad en esa zona, y si Lactalis concentra el trabajo en Juan Lacaze habrá más afectación laboral en Cardona, que ya tiene personal en el seguro de paro.
Irregularidades
La venta de Granja Pocha se hace tras recibir el pasado año 850 mil dólares, promedio, dentro del programa de reconversión de la industria láctea, que solicitó y le aprobó el gobierno en febrero 2024. Ese préstamo era para hacer más competitiva la planta y lo tiene que devolver en tres cuotas, en un plazo de 15 años, según el documento firmado por el presidente Luis Lacalle. No ha pago la primera cuota y anuncia la venta a una empresa extranjera. “A los préstamos los paga el pueblo uruguayo”, dijo Méndez, indicando también que “faltan controles del gobierno para comprobar el destino de los préstamos”.
