MONTEVIDEO (Uypress)- Un informe de la Auditoría Interna de la Nación (AIN) reveló irregularidades en la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), incluyendo gastos sin crédito, deudas acumuladas y falta de controles. El documento señaló que “no hay certeza” del monto total de las deudas sin crédito, las cuales ascendían a $ 2.436 millones en setiembre de 2024.
ASSE inició 2024 con un crédito inicial de casi $16 mil millones para gastos de funcionamiento. A lo largo del año, recibió cinco refuerzos presupuestales, alcanzando un crédito final de más de 24 mil millones. Sin embargo, estos montos no incluyen las «deudas sin crédito», cuyo monto exacto aún se desconoce. En setiembre de 2024, estas deudas sumaban $ 2.436 millones.
La evolución de las «deudas sin crédito» muestra un aumento constante: 75 millones en 2018, 376 millones en 2019, 563 millones en 2021, 1.368 millones en 2022 y $ 3.582 millones en 2023. El ministro de Economía, Gabriel Oddone, expresó su preocupación por los «gastos a asumir» heredados del gobierno anterior, calificando a ASSE como un organismo con «mayor gasto permanente, facturas encajonadas y deuda flotante».
Criterios de priorización y pagos postergados en ASSE
Desde enero de 2024, el Ministerio de Economía y Finanzas estableció cupos para gastos por libre disponibilidad, fijando topes mensuales. La Gerencia Administrativa de ASSE priorizó pagos a «proveedores asistenciales imprescindibles, continuidad asistencial, proveedores sensibles a los flujos financieros, empresas tercerizadas y proveedores locales pequeños». Los gastos no priorizados en un mes pasan al siguiente, con un criterio de antigüedad.
A enero de 2025, la antigüedad promedio de las deudas era de seis meses. Los gastos pendientes de pago ascendían a $5,403 millones, equivalentes a unos US$127 millones.
ASSE también recurrió a acuerdos con proveedores asistenciales importantes, estableciendo pagos fijos independientes del uso de servicios, excepto en casos de «amenazas de corte de servicios».
Falta de controles y planificación deficiente en los últimos cinco años
El informe de la AIN destacó la ausencia de mecanismos en ASSE Central para identificar oportunamente las necesidades de las unidades ejecutoras. Esto generó contrataciones sin relevamientos previos, afectando la eficiencia de las compras. Además, no se presentaron planes de acción para mitigar riesgos ni se realizaron auditorías de seguimiento.
El relevamiento abarcó el período de enero a setiembre de 2024, aunque algunas pruebas consideraron un período más extenso. Se detectaron facturas de ejercicios anteriores ingresadas con créditos del ejercicio actual, así como facturas pendientes no ingresadas al Sistema Integrado de Información Financiera (SIIF) por falta de crédito.
Foto: Mauricio Zina / adhocFOTOS
