En medio de reclamos por la privatización del agua, la contaminación y el mal manejo de los suelos, este sábado se conmemora el Día Mundial del Agua. En Uruguay, más de 80 organizaciones sociales realizarán una movilización en la tarde, marchando desde el Obelisco, en 18 de Julio y Bulevar Artigas, hasta el Pabellón de la Música, en el Parque Rodó.
Marcos Umpiérrez, integrante de la Coordinación por el Agua y la Asamblea de Santa Lucía, dialogó con Nada que perder y compartió su preocupación por la “especulación financiera” en relación al agua, y “la no-gestión del ambiente”. El activista ambiental explicó que la falta de controles y sanciones “reales” lleva a los emprendimientos económicos “a prácticas contaminantes”.
Los focos de atención de las organizaciones vinculadas al agua y el ambiente son numerosos en nuestro país. Entre ellos se encuentran las iniciativas de producción de hidrógeno verde, el proyecto Neptuno-Arazatí, la instalación de monocultivos de eucaliptos y de soja transgénica, y el uso intensivo de la tierra que deriva en la generación de cianobacterias.
Umpiérrez destacó “que el cambio climático no es solo un proceso natural”, y que está influido “por las acciones de la humanidad”. También señaló que “la deforestación, y las grandes plantaciones de monocultivos tienen efectos en el ciclo hídrico”, pues generan cambios en el escurrimiento, la absorción y la evaporación del agua. El activista alertó que estos procesos contribuyen a fenómenos como el de la sequía que hubo en 2023, por la que la zona metropolitana se quedó sin agua potable.
“No queremos renegociación, queremos que no haya proyecto Neptuno”, continuó el integrante de la Coordinadora por el Agua. La razón detrás de la decisión es que la iniciativa es promovida por “un conglomerado de empresas privadas que violentan el artículo 47 de la Constitución”. En él se establece que la gestión y producción del agua debe ser enteramente pública y estar en manos del Estado. Asimismo, “no consideramos que tenga las garantías ambientales, en la calidad del agua y el cuidado del acuífero” que está por debajo de la obra prevista, concluyó.