“El policía apenas puede llegar a fin de mes”, sostiene el sindicato canario, que también apunta a empeoramiento de condiciones laborales.
El Sindicato de Policías Agremiados Canarios (Sidepac) emitió en las últimas horas un acre comunicado en el que denuncia pérdida salarial de los uniformados y deterioro en las condiciones laborales en las que se desempeñan.
“Esta asociación sindical policial, contra viento y marea denuncio públicamente y en diferentes ámbitos, como el parlamentario y el gubernamental, la rebaja salarial que hemos sufrido del 2020 a la fecha y la probabilidad de no alcanzar los guarismos de fines del 2019”, reza el envío.
Según el sindicato, “jerarcas de Gobierno de alguna manera han corroborado” dichas afirmaciones. “En el día de hoy podemos reafirmar el retroceso brutal que hemos sufrido en materia salarial”, insiste.
“A esto se le suma el recorte presupuestal que está a flor de piel y se nota día a día en la cartera del Ministerio del Interior”, denuncia Sidepac, y aporta un ejemplo de las consecuencias de esa reducción. “Se obliga a trabajadores policiales a circular en un patrullero en el que dos de las puertas no abren, poniendo en riesgo la seguridad y la vida de los compañeros, así como de terceros”.
“Entendemos que tuvimos una pandemia en el camino, pero mientras que subían los precios de las canastas abruptamente, el salario nunca las acompañó. Curiosamente, para asesores ministeriales y jerarquía esa condición no existió y tuvieron sus aumentos salariales dejando de lado al personal subalterno”, consideran desde el gremio canario.
“El policía apenas puede llegar a fin de mes, las solicitudes de canastas han crecido exponencialmente, el retroceso es evidente y desolador”, lamentan los uniformados.
“Hoy los policías requieren mayor cantidad de horas por Art. 222, en un panorama de caída de la contratación de estos servicios por recorte del propio Estado”, añade el texto, en el que se enumeran otras acciones que los agentes se ven en necesidad de llevar a cabo en procura de redondear un ingreso acorde a sus necesidades.
“Aumentan las intenciones de ser parte del PADO [Programa de Alta Dedicación Operativa] y así cobrar el complemento correspondiente, o incluso en trabajos fuera de la Institución para cubrir gastos básicos mensuales” y también se apela a “cruzar a la vecina orilla para hacer rendir el salario”.
“El pasado, que estuvo lleno de promesas de apoyo hasta hoy incumplidas, se transformó en un presente sin motivación alguna, atado a un futuro incierto”, concluye la misiva.
Causa Abierta