El Instituto Nacional de Estadística presentó este martes los datos del censo poblacional 2023, que arrojó un crecimiento poblacional de 2,5% en comparación a la medición de 2011, totalizando 3.499.451 habitantes.
Montevideo sigue siendo el departamento más poblado: concentra el 37% de la población del país. Sin embargo, también es el departamento más expulsor, ya que cada año, emigran de él seis de cada mil habitantes.
Maldonado, Canelones y Rocha fueron los departamentos que registraron un mayor crecimiento poblacional, seguidos por San José, Colonia, Salto y Durazno. En tanto Montevideo, Flores, Lavalleja, Soriano y Treinta y Tres decrecieron en población respecto a 2011.
Por otro lado, el censo contabilizó 1.659.048 viviendas en todo el país, de las cuales el 81% estaban ocupadas. Maldonado y Rocha son los departamentos con mayor porcentaje de viviendas desocupadas.
Además, arrojó que el 30% de los hogares eran unipersonales.
Casi la cuarta parte de la población censada tenía al menos una discapacidad (23%) y al menos un 1% padecía una discapacidad grave. Una innovación de este censo fue que indagó acerca del trastorno del espectro autista: un 0,7% fue diagnosticada.
El doctor en Ciencias Sociales y magíster en Demografía, con especialización en Estudios de Población, Martín Koolhaas, destacó en Informativo Carve del Mediodía que los datos no son sorpresivos debido a que son resultados que se esperaban.
En esta línea, resaltó que “el aporte principal” del censo es cómo se distribuye la población en el territorio y la heterogeneidad de ese crecimiento a nivel del territorio, es decir “cómo vivimos”.
Koolhaas destacó que a nivel de políticas de población, hace bastante tiempo está en agenda tratar de incentivar el crecimiento de la población. Sin embargo, indicó que las políticas deben apuntar a tener medidas de conciliación, es decir, de que las personas puedan decidir qué cantidad de hijos realmente quieren tener, fortalecer el sistema de cuidados para que no sea un peso, entre otras cuestiones.
Por otra parte, hizo referencia a la implicancia de los saldo migratorio, es decir, la diferencia entre inmigraciones y emigraciones, que demuestra que existe un saldo migratorio cero. “Quiere decir que, más o menos, recibimos la misma cantidad de población desde el exterior que la que expulsamos”, aseguró.
“Los flujos de inmigración extranjera son más significativos que en el pasado reciente, de hecho, creció el porcentaje de personas inmigrantes, pero el 4%, que se observa hoy en día, es bastante más bajo que lo que tienen países de mucha inmigración, que están muy por encima del 10%. En términos de inmigración, en realidad el censo no arroja directamente información, porque el objetivo del censo es censar a las personas que viven en Uruguay”, agregó.