Empezaron a disputarse los cuartos de final de la Copa América con el duelo entre Argentina y Ecuador, que terminó en empate a 1 y posterior triunfo argentino en los penales por 4 a 2. El partido tuvo en sus primeros minutos a Ecuador mejor posicionado en cancha, cortando todos los circuitos albicelestes y llegando con peligro al arco de Martínez, pero sin llegar a dar el golpe final. Argentina empezó a soltarse más al promediar la media hora de partido, y en pocos minutos más llegaría el gol que sirvió para abrir el marcador: centro de Messi y dos cabezazos en el área, Mac Allister en el primer palo y Lisandro Martínez en el segundo para gritar el primer gol. En esos minutos finales del primer tiempo Ecuador jugó con algo de nerviosismo producto del golpe que significó el gol. En la segunda mitad un Ecuador con mejor resto físico empezó a ser cada vez más peligroso a medida que corría el reloj, generando varios tiros de esquina que complicaron a Argentina; en una de esas acciones de pelota parada, De Paul interceptó una pelota con la mano y Matonte cobró penal: Valencia pateó y engañó a Martínez, pero la pelota dio en el palo y Ecuador desaprovechó una clara oportunidad. Pero la revancha llegaría en los descuentos y después de mucha insistencia, cuando Kevin Rodríguez cabeceó para empatar agónicamente el partido y mandar la definición a la tanda de penales. Y desde los doce pasos apareció la jerarquía del campeón, que tuvo en las manos de Martínez a su salvador, atajando los dos primeros penales de la tanda. Ecuador estuvo falto de confianza, en un partido en el que el campeón estuvo al borde del nocaut.
Fuente : El Telégrafo