En agosto de 2020 Antel llamó a licitación para contratar servicios profesionales de auditoría para el complejo multifuncional, pero la empresa ganadora, Ecovis, sólo presentó un informe en dos partes que no es lo que pidió el directorio de la empresa pública en las bases del llamado. La empresa reconoce que realizó “Informe de Aseguramiento Independiente” y en su página web se detalla que este tipo de informe no es una auditoría.
El pliego de condiciones para la contratación de Ecovis establecía que Antel llamaba a una licitación para contratar servicios profesionales de auditoria para el Antel Arena.
En el acuerdo de las bases de la contratación, la telefónica estatal pedía realizar una auditoría sobre el costo total del complejo multipropósito, sobre las contrataciones de terceros en nombre del mismo, un análisis jurídico sobre las contrataciones y un análisis de resultados económicos del Antel Arena.
En dos de estos cuatro ítems se pedía realizar expresamente una auditoría. Uno en particular referido al epicentro del debate público, relativo al costo de la construcción.
El 24 de setiembre de 2020 el directorio de Antel resuelve contratar a la empresa Ecovis para realizar la auditoría del Antel Arena bajo un proceso de licitación abreviada.
El 21 de diciembre de 2020 Ecovis presentó un primer informe, con los resultados de su “trabajo sobre la Auditoría sobre el costo total del Complejo Multifuncional Antel Arena y las obligaciones pendientes”.
Para una segunda etapa presentaría el otro informe sobre el resto de los ítems a auditar.
El primero es un resumen ejecutivo y un cuerpo de “Antecedentes” donde se describe los procedimientos, los “hallazgos obtenidos y conclusiones” en relación a la “Auditoría sobre el costo total del Complejo Multifuncional Antel Arena” y “las obligaciones pendientes”. No se identifica como dictamen de auditoría, sino como un informe preliminar.
Luego, en el informe final presentado por Ecovis el 21 de abril de 2021 bajo el título “Informe de Aseguramiento Independiente” se puntualiza que debe ser leído en conjunto con el informe preliminar presentado el 21 de diciembre de 2020.
Ese informe preliminar no tuvo su correspondiente dictamen, y se declara al directorio de Antel que el trabajo efectuado se enmarca “dentro del trabajo de aseguramiento contratado en la Licitación Abreviada J101600”, realizado “de acuerdo con la Norma Internacional de Encargos de Aseguramiento 3000 emitida por la Federación Internacional de Contadores (IFAC por su sigla en inglés)”.
Los «Encargos de Aseguramiento» son distintos de los trabajos de auditoría o de una revisión de información financiera histórica.
Fuentes consultadas de Antel aseguran que «nada de esto fue observado o siquiera comentado por los receptores de los informes de Ecovis, pues el alcance de los trabajos contratados, al menos en dos de los ítems, no se cumplió. No se realizó una auditoría sobre los costos del Complejo ya que no se cuenta con el dictamen de auditoría, solo con un informe preliminar. Tampoco se cuenta con un dictamen de auditoría sobre las contrataciones de terceros en nombre de éste»
El documento final de la contratación se emitió como un “Informe de Aseguramiento Independiente”. Un informe de aseguramiento (non-audit assurance engagement, en inglés) es un informe que tiene como objetivo proporcionar a sus usuarios un nivel de seguridad razonable o moderado sobre si la información objeto del trabajo, contiene o no errores materiales, aumentando el nivel de confianza de los usuarios sobre determinada información. Pero no es una auditoría.
Asimismo, en la página de Ecovis hay un capítulo sobre la norma internacional de los encargos de aseguramiento y allí se establece por la propia empresa que estos son distintos de la auditoría de estados financieros o de la revisión de información financiera histórica.
fuente : m24.com.uy