Por Sofía Moure
La ciudad argentina se ve beneficiada por el éxodo de uruguayos y quiere transformar las compras minoristas en estadías más largas.
Las ciudades del litoral argentino apuntan a atraer el turismo de Uruguay para la temporada de verano.
Cualquier persona en Uruguay ya ha escuchado hablar de la diferencia cambiaria con Argentina, la brecha de precios que existe entre ambos países y el efecto que esto tiene en la economía local, sobre todo por el éxodo y el desvío de consumo que se observa de forma habitual. Sin embargo, el efecto es contrario del otro lado de la frontera: el mayor flujo turístico y de consumo en las ciudades del litoral argentino contribuyen a impulsar sus economías y, frente a la temporada de verano próxima, ya se preparan para recibir a los uruguayos.
El Ministerio de Turismo local trabaja activamente para atraer visitantes extranjeros con medidas tales como la exención del IVA en determinados rubros durante la temporada; pero también se enfoca en retener a los turistas uruguayos, promoviendo los destinos internos.
Sin embargo, para este último público tiene una competencia directa: las distintas oficinas de las ciudades de frontera de Entre Ríos, que ya ven como, semana a semana, los autos con patente de Uruguay “cruzan el charco”. Y pretenden que, durante el verano, la situación continúe e, incluso, puedan recibir todavía más uruguayos.
Las largas filas de autos para cruzar desde Uruguay hacia Argentina ya son habituales en feriados, fines de semana largos y vacaciones.
Captura: Subrayado
Las compras minoristas como puerta hacia el turismo
Así como de este lado de la frontera, las largas filas de autos en los puentes internacionales son malas noticias para la economía litoraleña y nacional, para la provincia vecina de Entre Ríos es todo lo contrario. Y si bien este flujo de visitantes se ha intensificado en los últimos meses a partir del aumento de la diferencia cambiaria —por la devaluación argentina, el aumento del dólar blue o paralelo y, a su vez, un fortalecimiento del peso uruguayo durante buena parte del año—; esto es algo que sucede desde hace un tiempo.
“Desde la apertura del puente en post pandemia se ha ido incrementando la presencia de uruguayos en nuestra ciudad”, explicó a Ámbito el secretario de Turismo y Cultura de Colón, Federico Escher. “Históricamente se visitaba la ciudad durante el día y para realizar compras minoristas, pero tanto el sector público como el privado hemos promocionado la ciudad como destino turístico dando a conocer todas las opciones de alojamiento, gastronomía y atractivos procurando que las personas extiendan su estadía”, añadió, dando cuenta de una situación estructural que han sabido aprovechar para beneficio de la localidad.
Este escenario de visitas en el día y compras minoristas todavía se puede observar en las góndolas que quedan vacías en los supermercados de Concordia y Gualeguaychú, por ejemplo —que ponen a prueba los controles en las fronteras para, luego, poder ingresar a Uruguay algo más de los 5 kilos de mercadería permitidos por ley—; y en las largas filas en estaciones de servicio para cargar combustible a pesar de que muchas cobran un diferencial del 35% a los vehículos con patente extranjera.
Incluso, hay quienes consideran vivir en Argentina sin dejar de trabajar en Uruguay, aprovechando la diferencia cambiaria para tener un mejor pasar del otro lado de la frontera.
Si bien no hay estadísticas concretas, desde la Cámara Entrerriana de Turismo estiman el mayor impacto del éxodo uruguayo a las ciudades de frontera tiene que ver con lo comercial, en un 95%. El 5% restante se observa en gastronomía y en el uso de servicios turísticos.
Los uruguayos, un objetivo para el verano
En este contexto de visitas frecuentes, y ante la cercanía de la temporada de verano, las ciudades entrerrianas se preparan para hacer del viaje en el día una estadía más prolongada. “En vacaciones o feriados hemos experimentado la visita de turistas uruguayos que eligen ciudades como Federación, Colón y Gualeguaychú”, explicaron desde la Cámara Entrerriana de Turismo.
Al respecto, Escher señaló que “el año pasado en promedio estuvimos con un 15% de visitantes de la República Oriental del Uruguay, sin embargo en lo que va de este año el porcentaje viene creciendo mes a mes y esperamos poder superar el 25%” en cuanto a las cifras específicas de Colón.
Desde la cámara empresarial turística coinciden con estos números: la ocupación que se genera actualmente a nivel fronterizo general está conformada por un 25% de turistas uruguayos, mientras que el otro 75% corresponde a turismo de afluencia local argentina. El objetivo es elevar el porcentaje de visitantes de Uruguay.
Entre las acciones puntuales orientadas a esto, Escher destacó la presencia y promoción de la ciudad en diferentes tipos de eventos en Uruguay. Entre ellos, en la Semana de la Cerveza en Paysandú y en Termatalia de Salto. “Mantenemos muy buen vínculo con las autoridades nacionales y departamentales del Uruguay, donde además de dar a conocer nuestras termas ofrecimos publicitar el destino Uruguay en la ciudad de Colón”, explicó el secretario de Turismo y Cultura.
“Por otro lado, hemos desarrollado vínculos con influencers y medios de prensa para seguir dando a conocer los beneficios de Colón y la región Tierra de Palmares (6 municipios) donde existen circuitos de naturaleza, termas, playas, fiestas populares y gastronomía regional”, añadió.
“Creemos que es necesario seguir creciendo en una agenda común donde no solamente vengan los uruguayos a Argentina sino también que muchos argentinos que llegan a Colón conozcan el circuito termal del Uruguay que es muy accesible en términos económicos o las fiestas populares”, consideró Escher, dando cuenta de que la cercanía entre ambos países puede resultar beneficiosa; si bien, actualmente, para el litoral uruguayo sea más bien un problema a resolver.
Fuente : Ambito