Más de 30 empleados, en su mayoría cercanos al senador Coutinho, deberán dejar sus cargos en Salto Grande al finalizar el actual período de gobierno. Sin embargo, al menos 7 de estos funcionarios se niegan a hacerlo, generando indignación entre la comunidad local.
Los altos salarios ofrecidos por la Comisión Técnica Mixta (CTM) de Salto Grande han hecho que algunos se aferren a sus puestos. Esta actitud ha provocado malestar en la comunidad, que ve con desagrado cómo estos empleados se resisten a abandonar sus cargos a pesar de su aparente falta de idoneidad.
Al final del período de gobierno, la CTM tiene previsto realizar un llamado a concurso para cubrir estos puestos. Los requisitos para participar en estos concursos incluyen estudios, capacidad y experiencia en áreas específicas, condiciones que la mayoría de los actuales ocupantes no cumplen.
Existe preocupación de que los concursos puedan estar arreglados para favorecer a los actuales empleados, manteniéndolos en sus puestos a pesar de su falta de calificaciones. Fuentes dentro de la CTM indicaron que tanto el presidente Burutarán como otros altos funcionarios están más preocupados por sus sueldos y beneficios personales que por la integridad de la institución.
El secretario de la CTM, Carlos Silva, también nombrado por acomodo, se postula como candidato a diputado del Partido Nacional en Salto y está siendo duramente criticado. «¿Qué ejemplo da este tipo como candidato, cuando lo primero que hizo fue acomodarse en la CTM y vivir bien? Hoy quiere ser diputado para seguir viviendo bien él y no la gente,» señalaron las fuentes.
La situación en Salto Grande refleja un problema mayor de clientelismo y falta de transparencia en la asignación de cargos públicos. La comunidad espera que los nuevos concursos se realicen de manera justa y transparente, permitiendo que personas realmente capacitadas ocupen estos puestos y contribuyan al desarrollo de la región.
Fuente : Crónicas del Este