El patrullero iba con el barral encendido, sin sirena y no dieron la voz de alto antes de disparar. Uno de ellos hacía un vivo para Instagra
La Justicia, a través del juez Diego González, imputó con prisión preventiva a dos de los tres policías que estuvieron en el asesinato de Anthony, el adolescente de 14 años que murió por un disparo en la espalda. Además, otro joven de 17 que conducía la moto en la que viajaban ambos resultó herido y se encuentra internado.
El fiscal de Homicidios Carlos Negro presentó elementos en contra de los efectivos y González decidió enviar a prisión preventiva por 180 días a Kate Viera, la funcionaria que disparó contra la víctima y a Eduardo Acuña, quien estaba a cargo del patrullero el día en que se dio el hecho.
Negro describió algunos hechos que pudo comprobar, como que los dos adolescentes salieron en moto a comprar algo dulce y en el trayecto se encontraron con el patrullero, que llevaba a un tercer efectivo a la Seccional 24.
“El chico que manejaba dijo que la moto le había quedado acelerada”, agregó el fiscal en la audiencia y especificó que el patrullero venía con el barral encendido, sin sirena y tampoco dieron la voz de algo. En determinado momento, Acuña —que manejaba el vehículo— decidió emprender la persecución de los adolescentes.
Tal y como se muestra en un video que fue filmado por la víctima en el momento en que se dio el asesinato, Negro narró que cuando los efectivos ingresan al adolescente al patrullero, Acuña dijo a sus compañeros: “Gurises, acá nadie disparó”. “Con esa consigna llegan al Saint Bois y nada dicen de esto, simplemente que lo encontraron caído y no saben qué pasó. Se estaba cumpliendo la consigna de Acuña”, añadió el fiscal.
De acuerdo con la versión de la Fiscalía, el joven iba filmando para hacer un vivo en Instagram y, de hecho, en un momento interpreta que los policías no los estaban “correteando” a ellos. “Casi inmediatamente se escucha el grito desgarrador, el celular vuelta y continúa filmando”, acotó Negro.
La defensa de la funcionaria Viera sostuvo que los efectivos “simplemente estaban cumpliendo con su deber”. “Deciden tirar un tiro hacia abajo cuando uno de ellos se da vuelta y brilla algo, y ellos interpretaron ‘nos tiran’”, agregó la abogada Ana Laura Stratagno.
La penalista consideró que “quizá lo demás no estuvo bien”, en referencia a la intención de encubrimiento, pero insistió en que “la intención no fue matar al muchacho, era disuadir porque ellos se vieron atacados”.