Hay quienes el 31 de diciembre realizan determinados rituales para que el año que ya comienza sea próspero. Uno de los más conocidos es comer 12 uvas, y últimamente ha aparecido otro: pasear con una valija.
En Uruguay es común arrojar arroz a los recién casados como augurio de buena suerte; comer ñoquis los 29 y poner bajo el plato una moneda para la abundancia económica; no comer pollo el 31 de diciembre porque esta ave camina hacia atrás y puede significar que se va a retroceder en el año próximo. Este preámbulo es para dar paso a las tradiciones que existen y otras que han ingresado para el 31 de diciembre, y son las que vamos a enumerar a continuación.
Las uvas de la suerte. El 31 cuando sean las 12 de la noche están los que comen 12 uvas. Cada uva representa un mes del año, y se cree que comerlas trae buena suerte para cada uno de esos meses. El que logra comer todas las uvas sin atragantarte, se considera que esa persona tendrá un año lleno de prosperidad y felicidad.
Ritual de las Lentejas. En Uruguay no está muy extendido este ritual, pero existe. Según las creencias el grano de lenteja simboliza la abundancia y prosperidad. Se dice que comer lentejas traerá riqueza y suerte financiera durante todo el año. Además, algunas personas las colocan en un plato rojo para potenciar el efecto positivo de la tradición. Otros tiran lentejas crudas sobre su cabeza, las arrojan al suelo, las juntan y las llevan en una bolsita roja en el monedero o cartera durante todo el año.
Las velas. Dicen que según el color representan algo específico. Vela roja: representa la pasión, el amor y la vitalidad. Vela amarilla o dorada: atrae la prosperidad y el dinero. Vela verde: está relacionada con la salud y la abundancia. Vela blanca: simboliza la paz y la claridad mental.
Ritual de la valija. Este ritual lo vimos en Uruguay el pasado año y la verdad que cuando los vecinos salían a dar la vuelta de la manzana con una valija con ruedas, “pensamos se pasaron de alcohol”, pero no, es un ritual: Se cree que si en la noche del 31, justo después de la medianoche, se agarra una valija vacía y se sale a dar una vuelta implica que se va a tener un año nuevo lleno de viajes y aventuras. Este ritual está relacionado con la apertura a nuevas oportunidades y experiencias.
