La Guardia Republicana es la encargada de filtrar lo que se intenta ingresar en las cárceles de Uruguay, fundamentalmente en las más importantes como es el Penal de Libertad.
Así lo hizo uno de los efectivos cuando el subdirector de esa cárcel, Hugo Blanco, quiso ingresar con un celular que se negó identificar.
En una denuncia de un funcionario de la Guardia Republicana se expresa que se le solicitó a Hugo Blanco “de forma cordial” que mostrara el imei (un código de identidad que tiene cada teléfono móvil) de su celular personal que portaba, pero el jerarca respondió que es él quien realiza las órdenes por lo que consideró que no debía mostrar nada, informó esta semana el periodista Eduardo Preve en su columna La Tapadita en Nada Que Perder de M24.
Pese a que el efectivo de la Guardia reiteró el pedido para corroborar si coincidía con el número que se encuentra en el listado que tienen en la cárcel, ya que podría haber cambiado de aparato, Blanco volvió a negarse.
El asunto no quedó ahí. El jerarca policial solicitó la presencia del encargado del turno, y tras dirigirse al despacho de este, Blanco insistió que es el subdirector de la cárcel y que “si quería mandar ingresar un ómnibus cargado de celulares y llenar la cárcel de celulares, era su responsabilidad”.
M24 supo que ahora ese efectivo de la Guardia Republicana que denunció el hecho fue trasladado al Comcar por orden del jefe Álvaro Campos, amigo y compañero del subdirector del penal, el efectivo señalado por el policía.
En su descargo, el funcionario trasladado deja constancia que al querer ingresar con un celular al recinto penitenciario “se debe registrar marca color y Nro. del teléfono y finalmente el personal firme el libro respectivo a la salida debe nuevamente pasar por el chequeo comprobase que sea el mismo aparato y firma a la salida”.
Fuente : m24.com.uy