La UTU llega a todos lados ofreciendo la mejor herramienta que se le puede dar un adolescente o joven: la formación y la preparación para que pueda tener una mejor vida.
Cada vez se hace más evidente la necesidad de que el sistema educativo llegue a todos los rincones del país como forma de asegurar, tonto como sea posible, la igualdad de oportunidades que solo la educación es capaz de dar, para ir limando asperezas y zurciendo donde las circunstancias de la vida han generado roturas o escalones que no deberían existir. En esa tarea el esfuerzo de quienes son responsables de la educación es impostergable, urgente y permanente.
En los últimos días UTU brindó dos buenas noticias en ese sentido: el anexo agrario en Salto y el centro en Casavalle, Montevideo. Dos centros estudiantiles que una misma institución, fiel a su versatilidad, abrirá para dos perfiles de alumnos totalmente diferentes, pero que, sin embargo, pueden tener puntos de contacto a pesar de las distancias físicas y culturales entre unos y otros.
Empecemos por Salto. Se trata un anexo agrario en Rincón de Valentín, localidad ubicada en el centro del departamento, con unos 500 habitantes. El nuevo centro estudiantil fue instalado en un predio que el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca cedió en comodato, y la fundación Gastesi Martinicorena realizará las instalaciones adecuadas para la finalidad educativa.
En una casa allí emplazada funcionará la parte administrativa y los laboratorios; y los cursos comenzarán a dictarse a mediados de mayo, sobre Bachillerato Agrario.
Escuela Politécnica de Casavalle
El predio de Casavalle fue adquirido por UTU para la construcción de lo que será la Escuela Politécnica en la esquina de Av. Aparicio Saravia y Martirené.
La oferta educativa tendrá diversas orientaciones en bachillerato: Mecánicas integradas, Deporte y Recreación, Gastronomía, Electrotecnia, Robótica, Informática, Estética Integral, entre otras. Funcionarán cuatro aulas, talleres de mecánica, gastronomía, espacios de deporte y recreación, laboratorio de ciencias con ayudante preparador, laboratorios de electrotecnia, electrónica y física.
También habrá una sala de informática, biblioteca, cantina y espacios múltiples para diversas actividades, sala de lactancia, sala docente y dirección, informó UTU, que suma ese nuevo centro al inaugurado en febrero, también en Casavalle, en el Centro de Referencia de Políticas Sociales Aparicio Saravia, donde los jóvenes estudiantes podrán cursar Educación Básica Integrada y bachillerato de Deporte.
Los adolescentes y jóvenes para los que UTU instalará esos centros de estudio son totalmente diferentes, por eso los cursos a impartir también lo son. Cada cual estudiando y haciendo aquello que le gusta, el medio le ofrece ambas cosas, pero formándose y adquiriendo herramientas que serán de utilidad.
La realidad es que nunca se sabe lo que el futuro tiene reservado, y con el desarrollo tecnológico no es raro pensar que el joven que se forma en informática, electrónica o robótica en Casavalle y que nunca pensó en mudarse a Salto, pueda, en un futuro próximo, emplear sus conocimientos en sociedad o junto a quien estudia agronomía en la nueva escuela agraria de Rincón de Valentín a 500 kilómetros de distancia.
La educación puede hacerlo posible, y si un vínculo así o similar se diera con otros protagonistas de otros centros de estudio y departamentos, estaríamos viendo y viviendo el rol emparejador e impulsor de la educación, y la verdadera integración social.
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